Rodrigo comienza a hartarse, nuevamente, con la actitud de Isadora, quien lo chantajea, cela y controla, pues su miedo de perderlo a manos de Gaviota sigue latente.

No importa que su hijo ya haya nacido ni que Gaviota se haya alejado de Rodrigo, Isadora no puede parar de sentir celos y, por ende, desconfiar de su marido, creando conflictos que solo desgastan su matrimonio.

Después de ser llevada al hospital por Gaviota, Isadora entre en labor de parto y da a luz a un niño. Sin embargo, algunos integrantes de la familia Montalvo dudan que el niño sea hijo de Rodrigo.

Ante el sufrimiento de su hermano, Daniela decide ir a ver a Gaviota para pedirle que por favor no lo rechace, que su amor por ella es genuino y que no se deje engañar por las mentiras de Isadora. ¿Qué pensará Gaviota?

Isadora se entera que Gaviota no fue despedida tal y como el Lic. Avellaneda le había prometido. Por lo tanto, decide visitarla para exigirle que se mantenga alejada de su marido.

Tal y como Mariana lo había arreglado con el Lic. Avellaneda sería trasladada a Guadalajara. Sin embargo, tanto Rodrigo como el Dr. Santoveña luchan por mantenerla en la Ciudad de México.